El primero en caer fue Fabio Jacobsen a 1.5 kilómetros de la meta, luego hubo dos caídas más a muchísima velocidad con lo cual no se podía distinguir quienes fueron los afectados. Todo esto con la meta frente a sus ojos. Desde atrás saltó Mathieu Van Der Poel como si de un cometa se tratara. Su punta de velocidad fue impresionante para hacer una lanzada espectacular a su compañero Jasper Philipsen, quien ganó por medio rin a Caleb Ewan, quedándose el australiano otro día con ganas de la tan anhelada victoria.
“Yo estaba feliz y cómodo con la velocidad. Fue una etapa muy difícil, muchas caídas alrededor mío al entrar al circuito. En la recta final me fui con Mathieu, quien hizo un increíble lanzamiento para mí. Fue un gran final, solo espero que quienes sufrieron caídas estén bien”, fueron las declaraciones de Philipsen al terminar.
Mientras que Van Der Poel dijo lo siguiente: “El circuito no fue nada seguro, el circuito muy duro y las curvas difíciles, al final yo encontré el momento perfecto para lanzar a Jasper, fue muy bueno volver a ganar juntos hoy”.
Cavendish terminó en la quinta posición detrás de Bryan Coquard (Cofidis), mientras que Phil Bauhaus (Bahrain) fue tercero.
Por su parte, Mads Pedersen (Trek) que finalizó décimo en la etapa de hoy expresó: “Los chicos hicieron un gran trabajo, es lo que es… mejoraremos para mañana y los próximos días”. Sobre la caídas dijo escucharlas fuertemente detrás de él.
Philipsen es el nuevo líder de la clasificación de los puntos, acumulando ya 150, seguido de Victor Lafay con 80 y Caleb Ewan con 73 puntos. Van Aert se encuentra en la sexta plaza con 60 puntos.
La fuga del día la protagonizaron Anthony Delaplace y Benoit Cosnefroy a 84 km de meta y fue neutralizada cuando faltaban 25 km. Sabíamos que hoy la etapa era para los velocistas y que la batalla sería al sprint.
En la general no hubo cambios, Adam Yates llegará mañana miércoles de líder a la primera etapa de los Pirineos vestido de amarillo.
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